Petróleo Sangriento (There will be Blood, 2007) es una película basada parcialmente en la novela de Upton Sinclair "Oil!" (publicada en 1927) y en algunas referencias de la vida del magnate petrolero Edward L. Doheny. Petróleo Sangriento fue dirigida por Paul Thomas Anderson y estelarizada por Daniel Day-Lewis, Paul Dano y Dillon Freasier. La película nos cuenta la historia de un minero en búsqueda de plata, Daniel Plainview (Daniel Day-Lewis), quien accidentalmente descubre un pequeño yacimiento de petróleo en un sitio llamado Coyote Hills (1898). Al principio extraen el petróleo a cubetadas, aunque su gente irá tecnificando el proceso mediante la implementación de sistemas de extracción. Plainview comienza a amasar una pequeña fortuna (1911) y tras conocer de la existencia de abundantes reservas petroleras en un pueblo llamado Little Boston (en California) no duda en utilizar a su pequeño hijo adoptivo, H.W. Plainview (Dillon Freasier), para convencer a los granjeros de que le vendan sus tierras o al menos se las arrienden. El pequeño Plainview sufre un accidente que lo deja sordo, lo cual afecta l relación con su padre, quien termina ingresándolo de manera temporal en un internado. Daniel Plainview encuentra cierta resistencia en un joven predicador de Little Boston, Eli Sunday (Paul Dano), quien desea que parte del dinero obtenido sea destinado en la construcción de una iglesia. Plainview no sólo se enfrentará a la codicia de Sunday sino a la de un supuesto medio hermano y a la de los representantes de la poderosa petrolera Standard Oil, quienes desean comprarle el yacimiento o de lo contrario bloquear el transporte del combustible a través del ferrocarril. Plainview establece un plan alternativo al construir un oleoducto hasta la costa, donde surtirá de combustible a la Union Oil. El único terreno que no posee Plainview es el de un viejo granjero que pertenece a la congregación de Eli Sunday, quien obligará a Daniel a "rebautizarse" a cambio del permiso para usar el terreno para el oleoducto. Pasan los años y Daniel se consolida como magnate petrolero (1927), aunque termina disgustado con su hijo H.W. Plainview, quien tomará su propio camino. Al final, Daniel y Eli Sunday tendrán un nuevo y fatídico encuentro en la mansión de Plainview, cuando Eli acude a pedirle dinero pues ha quedado arruinado. La frase final de Daniel lo resume todo: "I'm finished."
La historia se sitúa en los inicios de la industria petrolera y detalla el desarrollo de la misma, cuando recién comenzaba la lucha económica por el control del energético. Petróleo Sangriento es un interesante relato que se destaca por la excelente actuación de Daniel Day-Lewis, quien aparece en escena casi todo el tiempo y encarna a un obsesivo empresario dispuesto a prevalecer sin importar sobre quién tenga que pasar por encima. Day-Lewis realiza un papel digno del Oscar a Mejor Actor.
Petróleo Sangriento: *** (Buena)